jueves, 21 de noviembre de 2024

Plutón en Acuario, hacia una era de luz

 “No hay prisa. No hay necesidad de brillar. No es necesario ser nadie…salvo uno mismo.” (Virginia Woolf)

 

¡Por fin Plutón ha entrado en Acuario! ¡Estamos viviendo un momento histórico! El pasado 19 de noviembre, Plutón ha entrado definitivamente en el grado 0 del signo de Acuario, después de haber estado entrando y saliendo de Capricornio por los dos últimos años. Estará ahí por veinte años y en esos veinte años que nos quedan por delante se esperan grandes cambios a todos los niveles.

Este tránsito cambiará el mundo del modo en el que lo conocemos. Se producirán cambios radicales en las estructuras de poder. Capricornio, que tiene que ver con las estructuras, con las jerarquías, con el materialismo, ha pasado a mejor vida (ya era hora). Hemos vivido la época que se puede resumir con la frase “tanto tienes, tanto vales” y ahora entramos en una época completamente diferente en el que las ideas, el idealismo, el humanismo y el conocimiento, tomarán el control. Será como volver a una especie de era del Renacimiento.  La energía de Plutón tiene que ver con las transformaciones y renacimientos y la energía de Acuario, con la disrupción de los sistemas tradicionales.

Se producirá la ruptura de jerarquías obsoletas y un cambio de paradigma hacia la innovación, el colectivo y la igualdad. Habrá más horizontalidad. Se producirán revoluciones tecnológicas innovadoras que darán forma a nueva sociedad.

Acuario gobierna la tecnología y Plutón las crisis, las transformaciones y el poder. Habrá innumerables avances técnicos y tecnológicos, así como vanguardistas. La IA tomará el poder, las energías renovables estarán a la orden del día, la exploración del espacio será protagonista, así como la temática extraterrestre. Acuario rige todo lo que tiene que ver con el espacio.

Va a haber una transformación en la forma en la que vivimos e interactuamos. Acuario también puede ser un signo frío que se centra en su individualidad. Esta cara de la moneda, de forma negativa, puede suponer una menor interacción entre los seres humanos y que esta interacción sea suplantada por las máquinas o la tecnología, con un correspondiente auge e implementación del teletrabajo, de relaciones a través de aparatos en vez de personales, un aumento de la realidad virtual… esto es lo que podríamos considerar como "la sombra de Acuario". La parte más oscura de un signo o la sombra, es la parte que refleja los aspectos negativos relacionados al mismo. De todos modos, podemos colaborar para que esto no suceda. Sabiendo el riesgo, podemos adelantarnos para aminorarlo.  

También tiene que ver con un despertar global de la humanidad y de la conciencia. Dando paso a una época de espiritualidad, una época dorada de luz e inquietudes que van más allá de la banal cotidianidad. Esta era ampliará la expansión de la conciencia, la colaboración y la unidad, empujando a la humanidad a resolver sus mayores conflictos juntos. El foco cambiará de “yo” a “nosotros”, así como el nombre de este blog, creando un mundo más interconectado y justo para todos en el que nadie sea mejor que nadie o valga más que el resto.

Habrá un mayor aumento de la libertad individual y autenticidad de las personas. Por eso he añadido la cita de Virginia Woolf al comienzo de este texto. Nos atreveremos a ser nosotros mismos sin tapujos y mostrando lo que nos hace únicos. El verdadero éxito no son las posesiones materiales, sino ser nosotros mismos, atrevernos a mostraros tal y como somos, enseñando al mundo lo que nos hace únicos. Plutón en Acuario animará a la gente a romper patrones y formas de comportamiento obsoletas y romper las expectativas sociales para abrazar nuestra verdadera identidad. Llegará una ola de empoderamiento personal y creatividad así como de originalidad.

Sin embargo, no estaremos exentos de revoluciones en los próximos tiempos.  Si tenemos en cuenta que la Revolución francesa se fraguó con la misma posición de Plutón en Acuario, nos podemos imaginar o hacer una idea de lo que puede llegar a ocurrir. Los movimientos sociales aumentarán así como las revoluciones para conseguir esa igualdad y justicia para todos. Este tránsito trae cambios en los derechos humanos y distribución de los recursos. Nuevas formas de gobernar aparecerán beneficiando al colectivo.

Como habéis comprobado, tengo grandes esperanzas depositadas en los años venideros. El entusiasmo y la capacidad de soñar que me caracterizan, se han apoderado un poco de mí y espero poder compartir esa ilusión con vosotros. Creo que entramos en una época luminosa en la que los valores humanos volverán a ser más importantes que los bienes materiales. No todo va a ser de color de rosa, evidentemente, pues para que surjan nuevos modelos deben derribarse los antiguos, y quizá al comienzo se produzca caos e incertidumbre asociado a ello, pero si sabemos centrarnos en nuestro corazón y confiar, todo se solucionará hacia nuestro mayor bien. Confiemos y colaboremos en la elaboración de una nueva humanidad y de un mejor mundo para todos. Es posible hacerlo. 

 

¡Un fuerte abrazo!

 

Beatriz Casaus 2024 ©



jueves, 7 de noviembre de 2024

Un poquito de bondad, por favor

EL POETA Y EL MUNDO de Wislawa Szymborska


“Por eso tengo en tan alta estima dos pequeñas palabras: “no sé”. Pequeñas pero con potentes alas. Que nos ensanchan los horizontes hacia territorios que se sitúan dentro de nosotros mismos y hacia extensiones en las que cuelga nuestra menguada tierra. Si Isaac Newton no se hubiera dicho “no sé”, las manzanas del jardín hubieran podido caer ante sus ojos como granizo y él, en el mejor de los casos, se habría inclinado a recogerlas para comérselas con apetito. Si mi compatriota Maria Sklodowska-Curie no se hubiese dicho “no sé”, probablemente se hubiera convertido en profesora de química en un pensionado de señoritas de buena familia y en este trabajo, por otra parte respetable, habría transcurrido su vida. Pero ella se dijo “no sé”, y fueron exactamente estas dos palabras las que la condujeron, y no una sino dos veces, a Estocolmo, donde se galardona con el Premio Nobel a las personas de espíritu inquieto en constante búsqueda. Asimismo, el poeta, si es un poeta de verdad, tiene que repetir sin descanso “no sé”.  En cada poema intenta dar una respuesta pero, no bien ha puesto el último punto, ya le invade la duda, ya empieza a darse cuenta de que se trata de una respuesta temporal y absolutamente insuficiente. Así pues lo intenta otra vez, y otra, y más tarde estas pruebas consecutivas de su descontento con respecto a sí mismo los historiadores de literatura las sujetarán con un clip muy grande y las denominarán sus “logros”.”

(1996, Wislawa Szymborska)


Para el filósofo inglés Hobbes, el hombre era malo por naturaleza. Él abogaba por la idea de que el ser humano necesita para poder convivir una figura autoritaria, una especie de estado, que controle su impulso egoísta y agresivo. Sin embargo, el también filósofo y escritor, Jean-Jacques Rousseau, (con quien comparto pensamiento) decía todo lo contrario, que el hombre es bueno por naturaleza. Porque si alguien ve a otro sufriendo, siente una inclinación natural a auxiliar y que lo que hace malo al ser humano y despierta su agresividad, es la propiedad. Porque ello conlleva a la competencia, la envidia y la agresividad. Esto último no lo comparto. Todo sea dicho.

No obstante, me inclino en que la bondad es inherente al ser humano. Nos han enseñado ideas de que el mal está en el hombre. Pero está tanto el mal como el bien. Creo que nada es blanco o negro. Que dentro de nosotros tenemos el potencial de la bondad y de la maldad. Es una elección personal, como todo en nuestras vidas. Se trata sobre en qué lado nos posicionamos. Incluso la mayoría de las personas que cometen actos malos son conscientes de ellos y se arrepienten en algún momento. Tenemos dentro de nosotros un conocimiento intrínseco que nos hace distinguir entre la bondad y el mal, y creo que si fuéramos solo malos, no lo tendríamos. Hasta la persona más mala, ama a alguien o a algo. El mal es la ausencia de amor. Así como el frío es la ausencia de calor.

En estas situaciones, como lo que estamos viendo con la catástrofe de Valencia, es un ejemplo de ello. De cómo el pueblo y sus ciudadanos se ayudan unos a otros y han sido los verdaderos héroes demostrando una increíble capacidad de altruismo y cooperación. Y también como en este caso, el Estado ha sido quien no ha cooperado con la catástrofe como debe (ni de izquierdas ni de derechas, ambos han demostrado velar solo por sus propios intereses) contradiciendo a Hobbes y confirmando lo que la Madre María Teresa de Calcuta decía, que por cada acto de maldad, hay cien actos de amor. Lo que pasa, es que el mal hace más ruido. La bondad y el amor son silenciosos. Lo que predomina es la bondad, la ayuda, el altruismo, la cooperación y la generosidad.

Todo el mundo quiere que le vaya bien a los demás. Todos queremos paz y prosperidad para nuestros semejantes y sufrimos con las calamidades y malas noticias. Si hay alguien que no lo desea, es porque no está bien en su interior y algo le atormenta, pero la inmensa mayoría desea la felicidad y bienestar para todos.

Que no nos engañen. Estamos en una época de luz y de despertar de la humanidad. Si no hubiera tanta luz, no saldría toda la porquería y suciedad que está saliendo a la luz ahora (corrupción, escándalos sexuales, abusos de poder…y no solo en España sino a nivel internacional) Solo cuando tienes luz en el salón, puedes ver la suciedad que hay debajo del sofá para poder limpiarla. Sin luz no se ve y ahí sigue sin limpiarse porque como no lo ves, crees que no está. Solo la luz, la bondad, el perdón y el amor, pueden limpiar.  

Tengamos fe y esperanza siempre. Somos amor, solo que hay personas que lo han olvidado.

Las dos fuerzas más importantes que existen son dos: el amor y el perdón. No hay nada más fuerte ni que se le asemeje. Y las llevamos marcadas en nuestro ADN.

 

Beatriz Casaus 2024 ©

 

Acracia


Nos dicen lo que hay que hacer.

Si estás soltero, busca pareja.

Si eres mujer, ten, hijos.

Si tienes sobrepeso, adelgaza.

Si eres hombre, presume de lo que ligas.

Si hay elecciones, vota. Así te hacen creer que es una democracia.

Si tienes dinero, gastártelo.

Si no tienes dinero, ahorra.

Si no tienes casa, compra una.

Si tienes un hijo, ten otro.

Si estás aburrido, ve Netflix.

Si no ves la tele, no sigues el discurso oficial.

Si te informas por medios alternativos, eres un desinformado.

Si eres inteligente, hazte el tonto.

Si eres tonto, ten un enchufe. 

Si eres mayor, ve a un asilo.

Si eres bajita, ponte tacones.

Si eres alta, no los lleves.

Si quieres llegar a ser alguien, estudia.

Si quieres tener una vida digna, trabaja.

Si eres mujer, arréglate. Tu labor es ser atractiva.

Si tienes sueños, eres un ingenuo.

Si tienes prisa, corre.

Si eres bueno, eres tonto, sé malo.

Si eres malo, creces profesionalmente.  

En invierno, lleva abrigo.


¿Y si quiero ponerme una toalla?

 

Siempre estoy a favor,

de estar en contra de todo.

 

Beatriz Casaus 2024 ©



viernes, 18 de octubre de 2024

La elección de cómo tomarnos las cosas

 

Gandhi decía: “Sé tú el cambio que quieres ver en el mundo”. Ojito con la profundidad de esta frase... 

He aprendido mucho en referencia a esto. Ahora, cuando veo algo que no me gusta o que me desestabiliza de otra persona, en vez de ponerme en modo de víctima y echarle la culpa al otro, pongo mi atención en mí y no en esa persona. Es mi responsabilidad cómo me tomo las cosas. Es también lo que demuestra el grado de evolución que tengo como almita y de madurez como ser humano. En quien me aflige, no pienso más, sino enviarle amor. Solo está representando un papel para traerme luz en algún aspecto de mi ser que no había visto o del que no era consciente.

Hago un ejercicio de introspección y me pregunto qué hay en mí que proyecta eso que no me gusta. Es increíble lo revelador de esta técnica. Y lo mejor de todo, es que cuando me hago consciente de ello, todo encaja perfectamente y la situación se resuelve. La persona cambia totalmente. Pero el cambio no es desde afuera, exigiendo, cabreándonos, reclamando y apuntando con el dedo acusador. Si te sanas tú, elevas tu frecuencia y por ende, se resuelve todo hacia el mayor bien de todos los implicados.  Que sí, que la llave de todo está dentro de nosotros y no es un cliché por más usada que esté esta frase.

Todo lo que traes a tu conciencia, dándote cuenta de ello, te permite sanar. Comprendes qué hay en ti que ha atraído esta situación y las cosas se solucionan. La magia empieza dentro de uno mismo. El cambio es desde dentro de uno y todo lo externo, cambia por añadidura. Todo tiene una explicación aunque la desconozcamos con nuestra mente racional. Por ejemplo, si tienes una pareja que no se quiere comprometer, pregúntate si tú te comprometes contigo misma o si es a ti a la que no le gusta comprometerse. Qué situaciones en tu familia o infancia has vivido para pensar que no eres merecedora de que alguien se comprometa contigo. Ahí ya estás cambiando el foco de tu atención y poniendo cierta luz a la situación.

También es importante saber que una vez descubres qué es y la causa dentro de ti, entonces llega el momento del amor hacia uno mismo. De demostrar una profunda compasión hacia nosotros sin juicio alguno, tal y como lo haríamos con nuestros seres amados. Hemos obrado según lo que hemos vivido y aprendido. Haciéndonos conscientes de esto, cambiamos y mejoramos.

En cuanto veo a una persona que aún actúa desde la reacción y sin ningún tipo de conciencia, veo que la vida va a hacer con ellos lo que quiera, que no van a tener cierto nivel de responsabilidad sobre lo que los acontece y se van a perpetuar en el modo de existencia en el que se piensan que todos conspiran en su contra y no es así. Sí podemos cambiar las cosas. Sí somos poderosos. Para ello volvamos nuestra mirada hacia dentro. Desde allí, todo se puede cambiar. No seamos marionetas de lo que nos acontece, seamos creadores. Seamos conscientes. Sanemos. Cambiemos. Estamos aquí por alguna razón que aún nuestra mente lógica desconoce, pero de la que estoy completamente segura es de que tiene que ver con el amor.

 

Beatriz Casaus 2024 ©



viernes, 11 de octubre de 2024

Ser o estar, esa es la cuestión


 No te salves


No te salves

No te quedes inmóvil al borde del camino
No congeles el júbilo, no quieras con desgana
No te salves ahora ni nunca, no te salves
No te llenes de calma

No reserves del mundo solo un rincón tranquilo
No dejes caer los párpados pesados como juicios
No te quedes sin labios, no te duermas sin sueño
No te pienses sin sangre, no te juzgues sin tiempo

Pero, si pese a todo no puedes evitarlo
Y congelas el júbilo y quieres con desgana
Y te salvas ahora y te llenas de calma

Y reservas del mundo solo un rincón tranquilo
Y dejas car los párpados pesados como juicios
Y te secas sin labios y te duermes sin sueño
Y te piensas sin sangre y te juzgas sin tiempo
Y te quedas inmóvil al borde del camino y te salvas

Entonces
No te quedes conmigo


(Mario Benedetti)

 

Aquí estamos los pocos que hemos venido a romper moldes, prejuicios y estereotipos. Los que dudamos y lo clamamos en alto. Los que hablamos de nuestros miedos y mostramos nuestras inseguridades. Los que caminamos aunque esos miedos nos acompañen. Los que decimos lo que pensamos y nos mostramos tal como somos. Los que enseñamos nuestras emociones y vulnerabilidad. Planteamos cuestiones y sugerimos nuevas posibilidades. 

Siempre ha habido dos tipos de personas, los que hacen y los que observan lo que otros hacen.


Un caluroso abrazo a todos esos valientes.

 

Ser o estar, esa es la cuestión


Ser o estar.

Dos verbos que desde luego

no son lo mismo.

Hay gente que es

y hay que gente

que solo está.

Porque gente valiente hay poca.

Que digan lo que piensan,

lo que sienten,

con voz propia,

que se lancen,

que se mojen,

que tengan iniciativa,

con ganas de comprometerse

en cualquier ámbito,

que actúen según sus ideales

y valores.

Que sea auténtica,

natural,

transparente.

Hay miedo a sentir.

A darse.

A mostrarse.

Y yo me pregunto,

pero entonces,

¿para qué viven?

¿para qué estar

si no se es?

 

Beatriz Casaus 2024©



miércoles, 18 de septiembre de 2024

La orilla y el mar

 "En el atardecer de nuestras vidas, solo seremos examinados del amor" (San Juan de la Cruz)

 

Qué razón tenía Carl Gustav Jung cuando decía: “Lo que niegas te somete, lo que aceptas, te libera. Lo que resistes, persiste.” Dos semanas antes de cumplir 40 años, estaba acojonada. No dormía por las noches. Tenía como una especie de resistencia ante ese hecho. Y nunca me había pasado antes al cumplir años. Sin embargo, cuando llegó el día y vi que nada cambió, que por fin aceptas la realidad, te liberas. Dejas de resistirte y por lo tanto, pierde poder. Te liberas de lo que sueltas y te atas a lo que rechazas. 

Es más, resulta que me siento hasta más poderosa. No sé cómo explicarlo. De pronto, casi de forma mágica, tengo una sensación de poder dentro de mí que no puedo describir y sin embargo nadie me había hablado de eso y sí de todo lo malo que conlleva. Me he dejado llevar por pensamientos negativos asociados a la edad, por mentiras difamadas y creencias limitantes que nos han inculcado, sobre todo si eres mujer, y no es real. 

Yo acabo de aterrizar a esta década, tampoco sé tanto, pero os aseguro, sobre todo a las chicas, que se está genial a este lado, así que no tengáis miedo. Se siente increíblemente bien y sientes incluso más poder dentro de ti. 

Por eso quizá se intenta desprestigiar, porque no conviene saber que somos poderosos y más sabios a medida que vamos madurando. Siempre, lo mejor está por llegar y cada día de nuestras vidas es una nueva oportunidad. Doy gracias por cada día nada más levantarme y también las doy a lo largo del día por todo lo que tengo, me siento bendecida y afortunada de haber llegado hasta aquí. De que se me está dando este glorioso regalo llamado vida. Cada respiración es una bendición. 

Tuve la mejor celebración de cumpleaños que podía imaginar, acompañada de mi pareja y rodeada de muchos amigos. ¡Parecía una boda, jajajaja! No me cabe más agradecimiento en el pecho y mi corazón está lleno y cargado de cariño.

¡¡Un abracito y muchas sonrisas y alegrías para todos!!  


(Dejo por aquí el primer poema de mis 40, jejeje)


 

La orilla y el mar


Aliviarse

viéndote amanecer

en silencios eternos

quebrantados

de propósito.

 

Entre sombras

llego

a estas esquinas del mar

dentro de mí,

 

faltas

de aliento.  

 

Devuélveme

esa azul esperanza

que traen

tus sonrisas mojadas.

Némesis,

 

de sirenas.

 

Callada,

soy playa desierta

donde solo existe

la vulnerabilidad.

 

 

Se remueven

mis aguas internas,

turbias

y envenenadas

por pensamientos

calados

de suciedad.

 

Hay una fantasía soñada

en mi interior

conectada con la oscuridad

del océano.

 

Allí dentro,

no hay individualidad.

Solo una profundidad

estremecedora.

 

Todo lo oscuro

en realidad,

es profundo.

 

Meciéndome

sola

en el oleaje

de tu intermitencia.

 

Con lágrimas

disfrazadas de olas amargas

por caricias

a otro cuerpo

que no es ni el tuyo

ni el mío.

 

Es un esfuerzo combatirte

en tu sabor cruel a roca.

Donde las olas

y los corazones

se rompen

 

al chocar.

 

Amo ese cielo

que dejas a tu paso.

Esa estela que es guía, faro,

incluso,

un imán en los destellos

 

del agua.

 

Un sabio dijo:

Cuando dos almas

están destinadas

a encontrarse,


son como la orilla y el mar.

 

Comparten

el destino final de sus límites.

Naciendo

en un bucle infinito

del mismo

 

amor.

 

Beatriz Casaus 2024 ©






miércoles, 11 de septiembre de 2024

Enamorarse también está dentro de ti

“Hay almas a las que uno tiene ganas de asomarse, como a una ventana llena de sol.” (Federico García Lorca)

“Conectar sin buscarlo, es lo más parecido al infinito.” (Rubio José)

“I feel like a part of my soul has loved you since the beginning of everything. Maybe we´re from the same star.” (Emery Allen)

“I feel there is nothing more truly artistic than to love people.” (Vicent Van Gogh)

 

Esto lo escribí hace tiempo, pero siento que es atemporal y que siempre estará vigente. ¿Quién no se ha enamorado alguna vez? Todos nos hemos sentido identificados con esa sensación mágica que de pronto todo lo inunda. Enamorarse y sobre todo a una cierta edad, es descubrirte a ti mismo que no estás muerto. Pero lo que de verdad empodera y te devuelve a tu centro es saber que los sentimientos que te despiertan los demás en ti, no forma parte de ellos, sino de ti mismo. 

Si eres tú quien los sientes, celébrate a ti y al amor que hay en ti que es capaz de sentir eso. Tú eres el que llevas el amor dentro de ti. Siéntete orgulloso por la capacidad de sentir y de sentir de ese modo tan bonito. Porque eso sale de ti, no del otro. 

Un abracito.

 

Me gustas


Me gustas.

Me gusta la idea de saber que existes.

Me gusta que me inspires.

Me gusta que seas tú.

Me gusta que estés aunque no estás.

Más allá de que pase algo entre nosotros o no, eso da igual.

Me da paz que estés en este mismo tiempo y espacio.

¡Qué privilegio coincidir!

Me gusta más el mundo ahora.

Me gustas, aunque yo no te guste.

No tiene que ver conmigo.

Tiene que ver con la idea de que pensarte es un placer.

Me gustas, porque me gusta quien soy gustándome tú.

Y eso me gusta.

Me gusta saber que me guste alguien como tú.

 

Beatriz Casaus 2024 ©




jueves, 18 de julio de 2024

Ser espiritual en un mundo como este

 “Sé realista, planea un milagro” (Osho)


 En el mundillo espiritual, te encuentras mucha gente que va de “iluminada”. Como si estuvieran en otro nivel de evolución y miran por encima del hombro a los demás. Eso es ego, ego espiritual al fin y al cabo. Se creen perfectos y viven alejados del mundo. Piensan sus ideas, pero no las viven. Y estamos aquí para vivir, no para pensar solo.

Y la espiritualidad no es algo abstracto.

Es aquí, con el vecino gruñón, con el compañero insoportable, cuando te pitan con el coche, en el tráfico cuando tienes prisa, con la pareja egoísta, con los hijos desagradecidos, con la amiga envidiosa.

Es ser amable con todos, incluso con los que no te caen bien. Eso es una manifestación del amor incondicional. A mí cuando alguien no me gusta, le digo mentalmente: “Gracias por dejarme practicar contigo lo que es el amor incondicional. Te amo.” Y lo repito mucho, hasta que me sale verdadero amor hacia esa persona e incluso las situaciones se revierten en positivo.

Es tratar bien aunque estés teniendo un mal día. Nadie tiene la culpa de eso.

Es ayudar, dar las gracias, aprender de todo. La espiritualidad no es teoría, es una práctica diaria.

Es elevar el estado de conciencia, dando un significado a todas las experiencias, las malas incluidas.

Es aceptar tu sombra, es sacar a la luz tus partes oscuras para aceptarlas. Es abrazar tus errores, es pedir perdón. Es perdonar.

Es amarte y poner límites. Es aceptarte con tus michelines y tus canas y tu mala leche matutina. Es permitirte ser tú mismo.

Es elegir ser alegre y dar alegría. Ser un apoyo a los demás. Escuchar y comprender. 

Es intentar no enjuiciar. Estar atento a los juicios que emites y corregirlos, porque encarcelan.

Es disfrutar de los placeres sensoriales pero no apegarse a ellos. Ser agradecido por vivirlos.

La espiritualidad es investigar, claro. Descubrir quién eres, escuchar nuestra intuición.

Es tener intenciones puras y alimentarse de pensamientos positivos. 

Preferir hacer una respiración antes que perder los papeles. Es aprender a controlarse.

Es traer el cielo a la tierra. Es hacer sagrado lo cotidiano.

Esa es la verdadera prueba. El desafío de vivir en este videojuego. Con todo lo que ello conlleva.

El dolor y la gloria que está asociado a ello y que cada experiencia nos ofrece.

Estamos en el máster del universo. Nadie dijo que fuera fácil, pero al menos lo estamos intentando y hacemos lo que podemos. Seamos buenos con nosotros mismos y démonos mucho cariño. Porque es complicado, sinceramente. 

Somos imperfectos como humanos, pero dentro de nosotros mora la inmortalidad. La perfección. La esencia divina, nuestra verdadera naturaleza.


Beatriz Casaus 2024 ©


(Os dejo con una canción  muy"happy" como me gusta a mí llamarlas, jeje, que se titula: "Feels this good". Cuando se está bien por dentro, uno se siente muy bien, como el título de la canción. Y de eso se trata también la espiritualidad, de bailar, reír y pasarlo bien)