Estados de ánimo
Unas veces me siento
como pobre colina
y otras como montañas
de cumbres repetidas.
Unas veces me siento
como un acantilado
y otras como un cielo
azul pero lejano.
A veces uno es
manantial entre rocas
y otras veces un árbol
con las últimas hojas.
Pero hoy me siento apenas
como laguna insomne
con un embarcadero
ya sin embarcaciones
una laguna verde
inmóvil y paciente
conforme con sus algas
sus musgos y sus peces,
sereno en mi confianza
confiando en que una tarde
te acerques y te mires,
te mires al mirarme.
Mario Benedetti.
Poemas muertos
Llega,
la oscuridad con la madrugada
aunque no te pregunte
si quieres que venga.
Llega
tu sombra en la noche
aunque no exista
detrás tuya está siempre
soldada
a tu figura de marfil.
La certeza en la mirada
que guía al águila en su vuelo.
La claridad del búho
que todo ve sin luz desvela
que no existe animal miedoso
ni preocupado.
Quisiera atrapar la paz escondida
en sus miradas
pero el mar no es pequeño
y mis redes no agarran lo suficiente.
Llegan vientos viejos que sermonean
con reflejos volátiles.
Ráfagas de cambio
para los débiles con alma.
Poemas muertos,
palabras acabadas
en los confines de comisuras de labios
esperando resbalarse
en el abismo del descuido.
Allá llegan las hojas
tendidas en el suelo cuando caen
como flores
que nunca llegaron a serlo.
Llegan horas esdrújulas
que siempre se acentúan.
Llega la duda,
asentada en mi cabeza
como un nido de alondras.
Qué poco sabes
una vez me descubres.
Nunca
me he arrepentido de guardar silencio,
no así de haber hablado
más de la cuenta...
Llegan poetas perdidos
dejados a su suerte
para desembocar en ciudades,
muertos de frío.
Llega el polvo con la ceniza
cuando se ha quemado la tierra.
Llega la metáfora acabado el cuento,
Llega,
el oxígeno que exhalo de los árboles
que a su vez me han respirado
a mí antes.
Todo llega.
Beatriz Casaus 2013 ©
Tus versos llegan donde deben llegar
ResponderEliminarcomo la música de Queen.
Besos ;-)
La música de Queen llega muy lejos y por lo que veo mis versos también porque han llegado hasta el mismísimo Perú. Soy una afortunada porque me leas, gracias Jorge.
ResponderEliminarAntonio, en cuanto pueda seguiré tu blog y ¡gracias!