miércoles, 4 de diciembre de 2019

Efeméride del 4 de diciembre


Desde hoy 4 de diciembre, he decidido que voy a empezar con esta tanda de efemérides y descripción zodiacal representativa de cada signo del zodiaco, y que continuaré todos los meses, con fechas clave que me parecen remarcables.

Tal día como hoy de 1892, nació Francisco Franco. Este dato demuestra algunos detalles sobre los nacidos en un 4 de diciembre, nativos de Sagitario. ¿Qué quiero decir con ello? no me refiero a que los nacidos hoy son semejantes a esta figura histórica, ni mucho menos dictadores en potencia, pero sí que, de algún modo u otro, tendrán personalidades que no van a pasar desapercibidas.

El nacimiento de Francisco Franco es una fecha digna de remarcar en la historia de España, su vida produjo un giro en la historia de este país y su persona aún a día de hoy sigue suscitando controversia pues continúa albergando una gran cantidad de detractores y fanáticos a partes iguales. Franco pertenecía al signo de Sagitario y con todos mis respetos creo poder decir, según he investigado, que debió ser una persona colérica en algunos momentos de su vida, sin embargo, daba una imagen cándida, su voz parecía frágil y calmada y su aspecto era menudo.

Los nacidos en este día, son personas que suelen tener suerte, sobre todo a nivel profesional. Este también fue el caso del caudillo, quien, aun no siendo el mejor militar, no resaltaba a nivel físico e incluso en ocasiones fue objeto de burla durante su formación, llegó a lo más alto. ¿Fue debido a su carisma? no creo que ese fuera la razón. Durante su estancia en Marruecos demostró ser un gran estratega, y es posible que cayera en gracia a alguien o a varias personas que le ayudaron a proclamarse “jefe de estado”. Por ello, yo me arriesgo a citar que la principal causa de su ascenso fuera un extra de suerte, que, siempre según mi opinión, fue lo que le acompañó hacia su destino.

Nada pasa por casualidad, y los nacidos bajo este día, están tocados por la fortuna en algún momento de sus vidas. El llegar a lo más alto le llevó a creerse especial, e incluso él mismo se proclamaba como “enviado de Dios”. Se vanagloriaba de su éxito otorgándole un origen divino que muestra cierto endiosamiento alejado de una perspectiva realista.

 Franco tenía varios emplazamientos de su carta natal en Géminis y eso le debió capacitar de frialdad emocional y poca empatía (Luna en Géminis), ejemplo de ello fue que llegó a firmar sentencias de muerte mientras tomaba el café tranquilamente. Por otro lado, era un hombre muy familiar y cuidó mucho de su familia, siendo algo muy identificativo de su carácter. Estuvo casado con Carmen Polo quien era Géminis, justo el signo opuesto a Sagitario, lo que confirió un éxito en pareja y una estabilidad duradera en el tiempo, y así fue.

Dejando a un lado mi particular visión de esta efeméride, Sagitario es un signo expansivo, necesita expandirse en todos los ámbitos, sobre todo en su conocimiento, por ello suele verse atraído por los viajes, para aprender de otras culturas, y por ser social y extrovertido y empaparse de conversaciones interminables. En algunas ocasiones, los Sagitario suelen ser personas que hablan mucho, aunque en otras, según la carta astral particular de una persona, pueden ser grandes tímidos.

Es el signo de la filosofía y de la búsqueda del sentido de la vida. También del optimismo y la alegría, pero su contraparte, es la soberbia, agresividad, pueden ser narcisistas, prepotentes, falta de tacto, de humildad y tener mucho orgullo. También pueden ser grandes enemigos.

Por supuesto me gusta recalcar que esto no corresponde con todos los Sagitario nacidos un 4 de diciembre, pues hay que mirar con detalle la carta astral de cada persona en particular, y si no coincide con estas características, puede ser debido a que tenga otros planetas y signos dominantes en su carta natal que le haga distinto de esta generalidad.

Como dato curioso, el 4 de diciembre, según la cultura del folclore cubano, es el día de Santa Bárbara, así que los nacidos bajo este influjo, son los llamados “hijos de Santa Bárbara” y se si investiga sobre este detalle, se vuelve a resaltar, todo lo anterior que he citado.

 

Beatriz Casaus 2019 ©

domingo, 24 de noviembre de 2019

Piernas

"Si uno no encaja en el mundo que nació, entonces nació para crear uno nuevo" (Mafalda)


Piernas

Piernas que quieren visitar estrellas.

Caminan sobre el mar
y levantan prejuicios.

Pertenecen a una soñadora,
de esas que aún siguen creyendo
en la fuerza de las palabras.

Aprenden de hechos desagradables,
se alejan de sitios y personas tóxicas.

Recorren montañas
corren por calles vacías,
se pierden en un desierto de gente.

Salen de puertas que cierran mentes
y entran en lugares olvidados.

Bailan en días tristes,
saltan, cansadas, de felicidad.

Persiguen un sueño en silencio,
para caminar de la mano.

Suben escaleras ignorando el destino,
y bajan, cuando se está más arriba.

Piernas que quieren avanzar, avanzar,
y no saben cómo.

Encerradas en sus zapatos
transitan sitios desconocidos por costumbre
para librarse de la monotonía. 

El secreto,
es mantenerse en pie
e ir recogiendo a los que se van cayendo
por el camino.

Pero tiemblan, al mirarle.

Siempre a su lado
caminaban.





Beatriz Casaus 2019 ©



domingo, 17 de noviembre de 2019

¿Cómo haces sentir a los demás?



Me gusta decirle cosas bonitas a la gente, tanto a amigos, familia, compañeros de trabajo, como a desconocidos con quienes interactúe, si se da la oportunidad.

Yo también tengo la capacidad de decirle algo malo a alguien, pero elijo no hacerlo porque sé que puede hacer daño. Aunque no nos demos cuenta, decir simplemente a alguien “qué mala cara tienes hoy,  pareces cansado” inmediatamente hace sentir bajo a alguien. Sin embargo decirle algo bueno, le va a hacer sentir mejor también de forma inmediata. No cuesta nada y se levanta el ánimo.

A mí me gusta hacer sentir bien a la gente a mi alrededor, para ello elijo repartir palabras bonitas, abonar con semillas positivas y de alegría este campo de cultivo en el que estamos creciendo.

 El mundo se crea a través de nuestros ojos. Si elegimos ver lo bueno, es lo que veremos, y si elegimos lo malo, también. Teñir de color todo allá donde vayamos es mucho más divertido que un gris, por cómodo que sea.

Hay que ver siempre lo bueno de las personas y decírselo, sobre todo si notas que están mal, pero no solo por decir, sino porque de verdad se siente así. Al final, solo ves lo bueno en los demás y si no lo ves en alguien, es mejor apartarse.

Todos tenemos cualidades buenas, tanto físicas como interiores y si se resaltan, arrancan sonrisas de dentro hacia fuera.

 Si os dais cuenta, al dar los buenos días  se está diciendo o destacando algo positivo de la palabra “días”, no se dice “malos días”, sino buenos, que es una cualidad positiva. Hagamos lo mismo con las personas J

Beatriz Casaus 2019 ©



viernes, 4 de octubre de 2019

Viva la diversidad de opinión y pensamiento



Venceréis, pero no convenceréis

El General Millán Astray había llegado al paraninfo de la Universidad de Salamanca escoltado por sus legionarios armados con metralletas. Varios oradores soltaron los consabidos tópicos acerca de la «anti-España». Un indignado Unamuno, que había estado tomando apuntes sin intención de hablar, se puso de pie y pronunció un apasionado discurso:

«Se ha hablado aquí de guerra internacional en defensa de la civilización cristiana; yo mismo lo hice otras veces. Pero no, la nuestra es sólo una guerra incivil. (… ) Vencer no es convencer, y hay que convencer, sobre todo, y no puede convencer el odio que no deja lugar para la compasión. Se ha hablado también de catalanes y vascos, llamándolos anti-España; pues bien, con la misma razón pueden ellos decir otro tanto. Y aquí está el señor obispo, catalán, para enseñaros la doctrina cristiana que no queréis conocer, y yo, que soy vasco, llevo toda mi vida enseñándoos la lengua española, que no sabéis…».

En ese punto, Millán empezó a gritar: ¿Puedo hablar? ¿Puedo hablar?. Su escolta presentó armas y alguien del público gritó:¡Viva la muerte!, en lo que, según Ridruejo, fue un exhibicionismo fríamente calculado. Millán habló:»¡Cataluña y las Vancongadas, las vancongadas y Cataluña, son dos cánceres en el cuerpo de la nación! ¡El fascismo, remedio de España, viene a exterminarlos, cortando en la carne viva y sana como un frío bisturí!». Se excitó sobremanera hasta tal punto que no pudo seguir hablando. Resollando, se cuadró mientras se oían gritos de ¡Viva España!». Se produjo un silencio mortal y unas miradas angustiadas se volvieron hacia Unamuno:

«Acabo de oír el grito necrófilo e insensato de ’¡viva la muerte!’. Esto me suena lo mismo que, ¡muera la vida!’. Y yo, que he pasado toda la vida creando paradojas que provocaron el enojo de quienes no las comprendieron, he de deciros, con autoridad en la materia, que esta ridícula paradoja me parece repelente. Puesto que fue proclamada en homenaje al último orador, entiendo que fue dirigida a él, si bien de una forma excesiva y tortuosa, como testimonio de que él mismo es un símbolo de la,muerte. ¡Y otra cosa! El general Millán Astray es un inválido. No es preciso decirlo en un tono más bajo. Es un inválido de guerra. También lo fue Cervantes. Pero los extremos no sirven como norma. Desgraciadamente, hay hoy en día demasiados inválidos. Y pronto habrá más si Dios no nos ayuda. Me duele pensar que el general Míllán Astray pueda dictar las normas de psicología de las masas. Un inválido que carezca de la grandeza espiritual de Cervantes, que era un hombre, no un superhombre, viril y completo a pesar de sus mutilaciones, un inválido, como dije, que carezca de esa superioridad de espíritu suele sentirse aliviado viendo cómo aumenta el número de mutilados alrededor de él. (… ) El general Millán Astray quisiera crear una España nueva, creación negativa sin duda, según su propia imagen. Y por ello desearía una España mutilada…»

Furioso, Millán gritó: «¡Muera la inteligencia!». En un intento de calmar los ánimos, el poeta José María Pemán exclamó: «¡No! ¡Viva la inteligencia! ¡Mueran los malos intelectuales!».
Unamuno no se amilanó y concluyó: «¡Éste es el templo de la inteligencia! ¡Y yo soy su supremo sacerdote! Vosotros estáis profanando su sagrado recinto. Yo siempre he sido, diga lo que diga el proverbio, un profeta en mi propio país. Venceréis, pero no convenceréis. Venceréis porque tenéis sobrada fuerza bruta; pero no convenceréis, porque convencer significa persuadir. Y para persuadir necesitáis algo que os falta: razón y derecho en la lucha. Me parece inútil pediros que penséis en España».


Millán se controló lo suficiente como para, señalando a la esposa de Franco, ordenarle: «¡Coja el brazo de la señora!», cosa que Unamuno hizo, evitando así que el incidente acabara en tragedia.



Viva

Soy nieta de un buen hombre militar antifranquista y otro buen hombre franquista.
Soy hija de un ateo y una católica.
Quizá por eso me resisto a la institución eclesiástica y sin embargo albergo una espiritualidad que apareció a temprana edad y un amor profundo hacia el hombre más bueno que ha pisado la tierra, Jesús.
No hay ninguna guerra que no haya dejado más que muerte.
No he visto aún ninguna bandera que derrame sangre.
Pero los hombres sí.
Los únicos bandos que existen están en los pensamientos de las personas, los mismos que aún hoy siguen cobijando odio.
Ninguna idea es lo suficiente fuerte como para que me haga creer que una muerte está justificada.
No hay bandos, solo veo colores y los colores son neutros.
Como lo son nuestros corazones en la infancia, pero poco a poco somos domesticados en las diferencias, la competitividad, el odio e incluso hasta la violencia, que es la máxima expresión de la radicalidad o en la indiferencia, que nos hace creernos a salvo en una mayoría dormida y anestesiada por el consumismo.
Mi patria es el impenetrable Amazonas, Galicia, Cataluña, el infinito cielo de Wisconsin o mi amado Madrid y Toledo.
Soy del cielo bajo el que esté.
Todos pertenecemos solo a un padre y una madre o a unos hijos o esposos. Todo lo demás, es inventado.
Amo mi país porque lo conozco, pero también amo todo país al que tengo la oportunidad de conocer gracias a mi afortunada condición de persona del primer mundo.
Desde el cielo no se ven fronteras.
Sigo los valores silenciosos de bondad, solidaridad, compasión, fraternidad y paz.
No hacen ruido como pistolas o escopetas pero calan más hondo.
Mi estandarte es la cultura porque otorga sensibilidad, empatía e inteligencia.
Permite mediante autorización voluntaria de un artista, meterte en la cabeza de otro y empaparte de la visión de su mundo.
Es tan altruista que comparte sus palabras, sus creaciones.
Se desnuda dejando al descubierto todo aquello que no vemos de él y que sabe expresar a través del talento.
Eso nos hace ricos a todos, porque si algo sé es que las experiencias son lo único que nos hace crecer y mientras más tengamos, ya sean vividas en carne propia o ajena, más crecemos.
Es gracias a la diversidad que se despliega un amplio abanico de posibilidades de aprendizaje.
Uno es más cuando es más de uno.  
Amo la vida y eso es lo único que veo cuando miro a los ojos de alguien.
Viva la vida y el amor. 
Arriba la paz, la cultura, la inteligencia, los intelectuales que nos permiten vivir más de una vida, la solidaridad, la ayuda entre hermanos.
Que viva, y ya de paso, por favor, vivamos todos.
Pensemos como pensamos o seamos como seamos.
Vivamos.
No es broma.
Vamos hacia un abismo 
y yo no pienso caer.

Beatriz Casaus 2019 ©

martes, 2 de julio de 2019

Preguntas generales sobre astrología




Después de que mucha gente leyera el post que colgué hace tiempo titulado “La pareja ideal según la astrología”, ha habido personas que me han pedido que volviera a escribir un post sobre astrología, así que, aunque tarde, me he dispuesto a hacerlo. Voy a tratar de responder preguntas que siempre me han hecho, aunque he de aclarar que al ser tan genéricas las preguntas, las respuestas también lo son. Por supuesto, quien tenga alguna duda o lo que sea, puede escribirme por privado al e-mail que se indica en este blog, por Facebook, Instagram o en comentarios aquí abajo.


¿Cuáles son los mejores signos del zodiaco? ¿hay alguno que sea mejor que otro?

Según mi punto de vista ningún signo es mejor que otro. Yo suelo hacer una comparación con los colores. ¿Hay alguno mejor que otro? no lo creo, cada uno tiene sus propias cualidades y atributos que lo hacen especial y diferente. Es cierto que cada uno tiene su color/colores favoritos, pero eso es una cuestión de preferencias personales, en realidad ningún color es mejor que ningún otro y eso mismo se puede extrapolar a los signos del zodiaco.


¿Cuál es el peor signo del zodiaco?

Esta pregunta me la hacen mucho. En vez de peor, al igual que con el símil de los colores, en los que ninguno es mejor que otro, podríamos llamarlo “los que tienen peor fama”. Según mi punto de vista, los que peor fama tienen son Géminis y Escorpio. Aquí mucha gente se sentirá dolida y por eso quiero recalcar que no es verdad, pero es algo que se suele decir. Esa escasa popularidad en el caso de Géminis suele estar relacionado con la idea de tener dos caras o con saltar de forma inesperada de un estado de humor a otro que a veces puede resultar difícil de comprender y en el caso de Escorpio, su mala fama se debe a que se suele decir que es un signo rencoroso y vengativo. Sin duda, esto son generalidades de las cualidades más negativas de cada uno que por supuesto no tienen por qué gozar todos los signos Géminis ni Escorpio en su conjunto.


¿A qué elementos pertenecen los signos?

Los cuatro elementos que existen son fuego, tierra, agua y aire. Los signos que pertenecen al elemento fuego son Aries, Leo y Sagitario. Los signos que pertenecen al elemento tierra son Tauro, Virgo y Capricornio. Los signos que pertenecen al elemento agua son Piscis, Cáncer y Escorpio y, por último, los signos que pertenecen al elemento aire son Acuario, Géminis y Libra.


¿Por qué hay personas del mismo signo que son completamente distintas y no se parecen?

Me encanta que me hagan esta pregunta porque gracias a ello puedo responder algo que me gusta siempre aclarar. Una cosa es el signo solar, es decir, en qué signo transitaba el sol cuando se nació, por ejemplo, si una persona nace en el mes de julio en el que el sol está transitando por el signo de Cáncer se dice que esa persona es Cáncer. Sin embargo, una persona no es solo su Sol sino todo el dibujo de su carta astral en la que están emplazados todos los planetas en signos, casas y las posiciones que se forman entre ellos. Además, no tengo una creencia determinista de la astrología y creo que el ser humano es un ser espiritual mucho más poderoso que los rasgos de su personalidad, que además está inmerso en una sociedad determinada, que ha crecido bajo una cultura específica, que se ha criado en una familia que le ha inculcado unos valores y una forma de vida puntual y que ha crecido en un ambiente definido y todo ello puede hacer que alguien Cáncer sea completamente diferente a otra persona que también compartiese signo.  


¿Cuáles son los signos más orgullosos y egocéntricos?

Pido disculpas antes de nada por dar mi opinión sobre este tema. Pero como digo, es mi opinión personal y no es para nada ninguna verdad absoluta, sino mi punto de vista subjetivo, completamente argumentable y debatible con cualquier otra opinión. Para mí los signos que más pecan de egocentrismo, orgullo y soberbia son los signos de fuego seguidos de los de aire. Aries, Leo y Sagitario gozan de un sentido del “yo” muy desarrollado y tienen una mayor necesidad de ser el centro de atención. Así mismo su umbral de intolerancia hacia la importancia o logros de otras personas es menor. Lo que en ocasiones les puede hacer más envidiosos, celosos y hasta crueles o violentos si están mal configurados.

*Signos mal configurados: personas que tienen muchas configuraciones difíciles en su carta astral y pueden desarrollar los peores defectos de esas posiciones.


¿Cuáles son los signos más fáciles?

De nuevo, esta es mi opinión personal y siempre hablo a grandes rasgos porque en sí las preguntas son generales. Si por fáciles entendemos a personas más dóciles, o más fáciles de tratar, me atrevo a decir, que serían los signos de agua seguidos de los de tierra. De entre ellos destacaría a Cáncer y Piscis porque suelen ser personas más comprensivas y empáticas y destacaría también a Virgo y Tauro, porque suelen ser personas humildes y generosas de corazón. Aun así, conozco personas Piscis muy difíciles y egocéntricas o personas Virgo de muy mal carácter, porque como vuelvo a repetir, siempre hay que fijarse en la carta astral de la persona en particular.


¿Cuáles son mis signos favoritos y los que menos me gustan?

Como esta es una pregunta personal, respondo de forma personal y sin ánimo de ofender a nadie, pero me voy a mojar. Mis signos favoritos son Leo y Virgo y los signos que menos me gustan son Sagitario y Géminis. Me gusta Leo porque si está bien configurado, contiene los mejores atributos de una persona: noble de corazón, social, altruista, con mucho sentido del humor, creativo, justo, digamos que sería como el rey León de la selva. Virgo por su parte me gusta porque si está bien configurado, es un signo que siempre trata de conseguir la perfección en todos los ámbitos y eso, de forma sana, es una cualidad valorable. Además, la mayoría de personas Virgo que conozco son personas de trato fácil y cercano. En cuanto a los que menos me gustan, quizá algún Géminis de esos que pueden ser mentirosos o falsos pero con sonrisas permanentes y Sagitario, porque conozco casos de mujeres obsesivas, celosas y soberbias de ese signo y creo que me ha infundado una perspectiva negativa del mismo. Aunque he de decir que tengo amigas Géminis fantásticas, muy inteligentes y muy divertidas que quiero y amigos Sagitario, aventureros, simpáticos y con una gran filosofía de vida que adoro.

¿Cuáles son los signos más compatibles entre sí?



Se suele decir que los signos más compatibles son los que pertenecen al mismo elemento. Es decir, los signos de fuego son más compatibles entre signos de fuego, los signos de tierra son más compatibles entre sí y así respectivamente con los elementos agua y aire. Entre ellos se dice que forman trígonos, que es una posición astrológica muy armoniosa que provoca que las relaciones entre ellos fluyan y sean muy fáciles. También son compatibles la siguiente combinación de elementos: Agua- Tierra, Fuego-Aire. En este caso, la posición que se produce entre ellos, se llamaría sextil y es también beneficiosa.

Sin embargo, tal y como he comentado antes, no solo somos nuestro signo solar, sino todo el compendio de nuestras cartas astrales, por lo que, si una persona es Aries, pero en su carta astral tiene varios planetas en agua o tierra, puede ser muy compatible y llevarse genial con signos de agua y tierra. Por lo tanto, siempre habría que conocer nuestras cartas para poder atinar mejor en cuanto a las compatibilidades.


¿La astrología puede predecir el futuro?

Este es un tema bastante intrincado. Como he comentado no soy determinista con la astrología ni con nada. No creo que nada está determinado y no se pueda cambiar pues tengo fe en el poder del ser humano y en su fuerza de voluntad. Pero sí creo que hay ciertas tendencias que marca la astrología tanto sobre nuestro carácter, así como sobre algunos eventos de nuestra vida. La predicción del futuro en astrología se llama “revolución solar”. Yo no me dedico a ella, pero como he comentado antes, conozco personas muy profesionales que sí lo hacen y que puedo recomendar. Me gusta poner el símil de los viajes, antes de emprender un viaje, una persona puede marcar el itinerario a seguir, pero eso se puede cambiar y en un momento dado, hasta cambiar el rumbo en el viaje. Todos somos dueños de nuestro destino y tenemos libre albedrío.

¿Por qué la astrología tiene mala fama?

Por desgracia de ello se han encargado las personas que aparecen en los medios y que a veces se han convertido en personajes televisivos más que en verdaderos profesionales de este saber milenario o en las personas que lo ejercen sin escrúpulos. Sin embargo, en la antigüedad gozaba de un prestigio que se ha ido perdiendo. Culturas como la babilónica, egipcia y griega lo empleaban.  

¿Qué es el ascendente? ¿Es importante?

El ascendente es muy importante, casi tanto como nuestro Sol, pues es el encargado de definir nuestra personalidad, cómo actuamos en el día a día y en las diferentes situaciones. Incluso puede definir nuestro aspecto físico.

¿Cuáles son los planetas más importantes en la carta astral de una persona y qué representan?

Se dice que los planetas personales son la Luna, Marte, Mercurio y Júpiter y por ello saber en qué signo y casa se encuentran, así como los aspectos que se producen entre ellos y los demás planetas, define nuestra personalidad y en qué ámbitos de la vida afectan esas energías, además del Sol y el Ascendente ,claro.  La Luna tiene que ver con el “Yo emocional”, cómo nos afectan las cosas, nuestra vida emocional, anhelos y necesidades emocionales. Marte tiene que ver con nuestra energía en las acciones, la sexualidad, capacidad de trabajo y agresividad. Mercurio es nuestro intelecto, cómo trabaja nuestra mente, nuestra manera de comunicarnos y por último Júpiter tiene que ver con la expansión de conocimiento, vida social, filosofía…

¿Cuál es la mejor y la peor configuración para el emplazamiento de la luna?

Se dice que el mejor emplazamiento para un signo es cuando está “en su casa”, lo que significa que ese signo esté emplazado en su planeta regente. El regente de la Luna es Cáncer y por eso en ese caso, se dice que “está en su casa”. El peor emplazamiento para la Luna es cuando “está en caída” lo que quiere decir, que está en el signo opuesto al signo regente del planeta. En el caso de la Luna, La Luna en Escorpio “está en caída”. Con la Luna en Cáncer la persona es cálida, tiene arraigo familiar, es sensible, empática y con la Luna en Escorpio, a veces tiene altibajos emocionales que no puede comprender, hay una tendencia a ser una persona celosa y rencorosa, envidiosa y obsesiva. De todos modos, como digo, quizá una persona con Luna en Escorpio tiene ascendente Cáncer y es cálida en su día a día, pero puede tener muchos altibajos emocionales.

¿Por qué sé sobre astrología?

Siempre me he sentido atraída por la astrología, pero no soy ninguna experta en el tema ni mucho menos. Comencé a estudiarla desde que tenía 12 años (fue la primera vez que cayó en mis manos los maravillosos libros de Linda Goodman “Los signos del zodiaco y su carácter” y “Los signos del Zodiaco en el amor”) y desde entonces me volví adicta y me puse a estudiarla. Con los años he ido a varias escuelas de astrología, siendo una de Barcelona la que más ha influido en mi aprendizaje. También he de decir que desde pequeña me he dedicado a adivinar los signos de las personas, considero que tengo bastante intuición y en varias ocasiones he sorprendido a quien se lo decía (profesores, en fiestas con gente desconocida, a compañeros de trabajo, amigos de amigos, e incluso así fue como conocí a una de mis mejores amigas adivinándole el signo sin conocerle de nada) Siempre he sido una persona muy intuitiva y quizá me anime en otro post a hablar sobre las experiencias que me han ocurrido.



Beatriz Casaus 2019 ©



miércoles, 1 de mayo de 2019

Cada respiración está contada

" Si no has descubierto algo extraño durante el día, no puedes decir que haya sido un gran día" (John Wheeler)


Cada respiración está contada

El eco se descalza delante de mí,
no sé lo que esconde.
Allá atrás, debe estar enmarañado
todo lo que una vez comprendí.
No reconozco sus adivinanzas
ahora que camino bajo mis párpados.  
En mis murmullos agradezco cada respiración
que inhala la vida que desprende mi cuerpo.
En bajito y modestamente,
no sea que vuelvan esos mares
donde crecen los sollozos.
No estoy aquí para contar mentiras,
las mismas que me han contado a mí,
estoy aquí para salvarme de ellas.
Las ganas me asoman y se agitan en,
y alrededor mío, como haciendo hueco
a lo bueno que quiere llegar.
He descubierto que callando lo que sé
me hago más sabia,
prefiero no caer en la torpeza
de quien cree saber.
Hay silbidos de magia que alumbran 
con un ígneo resplandor esta noche,
escuchando como cuando éramos niños,
con esa misma inocencia
cargada de la más intensa pureza.
Y entonces recuerdo:
El perdón es como resucitar.
Te saca de las tinieblas y
vuelve a insuflar sosiego.
El perdón se olvida de recordar
conscientemente,
y arranca sentimientos estancados.
Es como el farolillo de mi calle,
que alumbra más
que los ojos que quisieron dejar de ver.
Tengo la luz de los focos de mil soles dentro de mí,
donde todo puede ser y no es a la vez,
compartiendo esa misma luz de todos.
La ventana está abierta dentro de mi casa
pero no da corriente,
sino infinitas posibilidades.
Cada uno integra una álgebra distinta por resolver.
Toda respiración está contada,
es probable que representen un número exacto
al final de cada existencia.
Pero yo nunca he sido de números,
sino de cada letra.
No traten de solo respirar,
¡dense cuenta de ese milagro!



Beatriz Casaus 2019 ©



jueves, 18 de abril de 2019

Mi compañero de baile

"Los que me rodean se niegan a aceptar que nunca podría vivir en el mundo cotidiano de las cosas y las personas. De ahí la irreprimible necesidad que tengo de alejarme de mí mismo y emprender aventuras que parecen inexplicables, porque nadie sabe quién es este hombre, ¡esa es quizás la mejor parte de mí! De todos modos, un artista es, por definición, alguien acostumbrado a vivir entre sueños y fantasmas" (Claude Debussy) 

Me he alejado por un tiempo de las redes sociales, me he dado cuenta que me quitaba paz y eso es un indicativo de que no es el camino correcto. Pero mi blog seguirá activo, escribir me aporta todo beneficios positivos :)

Este poema/cuento va dedicado a mi amor, por quien me siento tan agradecida, por cuidarme como me cuidas, porque te desvives para que esté bien, por cumplir siempre lo que dices, por tu infinito amor y por escuchar, tú también, mi música. 


Mi compañero de baile

Recuerdo, cómo bailaba una melodía que nacía en mi cabeza pero que tú también podías escuchar.
No hacía falta que ninguna otra persona la escuchara. Solo era necesario que los dos la sintiéramos dentro, porque era nuestra.
Percibíamos nuestra canción y éramos capaces de bailarla. Una y otra vez, una y otra vez.
Los demás cuchicheaban entre ellos, elucubrando qué haríamos, por qué no bailábamos para el mundo una canción que no escuchaban.
Lo que no sabían es que perdían su tiempo, sobre todo, se perdían descubrir su propia melodía y así poder bailarla también.  
Éramos felices bailando, tan felices, que los que cuchicheaban no lo entendían porque nunca llegaron a serlo.
Por eso se fijaban en los demás, para plasmar sobre ellos sus juicios que no eran más que anhelos y frustraciones disfrazados.
Qué vida tan vacía es una vida sin música, pensábamos.
Mientras, nosotros, no nos cansábamos de bailar y bailar al unísono de nuestros acordes.
Aquel que escucha su propia música, no necesita nada más que seguir su ritmo.
Sé que el mundo está construido por infinitas melodías y ya sé cuál es la mía.
Descubrí que la música nacía dentro de mí y como regalo de Dios, tú también la escuchabas.
El mundo se convirtió en una sinfonía a tu lado.
He nacido para bailar mi música, contigo,
mi compañero de baile.

Beatriz Casaus 2019 © 


viernes, 5 de abril de 2019

La teoría de los puntos


Esta teoría o mejor dicho “idea” es totalmente inventada por mí. No intento dar sentido al sufrimiento en el mundo, eso es demasiado grande y pretencioso, pero al menos a mí me hace la vida más llevadera, así que lo comparto por si acaso alguien está tan loco como para pensar como yo.
Desde que se me ocurrió, quiero pensar que vivo un poco más liviana en mi ingenuidad. Sigo buscándole una explicación al sufrimiento que se pueda demostrar, pero eso parece una quimera inalcanzable. La verdad es que ni por lo más remoto esta idea nacida en mi imaginación tiene ninguna validez científica ni de ningún tipo, pero me hace vivir con esperanza, que no es poco.
Siempre me he sentido especialmente atraída y tenido mucha sensibilidad por la gente que sufre, además constantemente he intentado buscar una explicación válida para intentar “entenderlo” (si es que ello se puede justificar de algún modo) o por darle algún sentido a las situaciones de injusticia que hay en el mundo. Es algo que siempre me ha carcomido por dentro. Sé que soy una pobre ilusa, pero creo que la ingenuidad a veces está ligada con una forma de ver el mundo mucho más bonita y positiva así que prefiero vivir de ese modo que, al contrario.
 Un buen día, estando en un restaurante, entró un chico adolescente, estaba solo y era medio ciego. Fue directo a la barra a pedir y luego se sentó cerca de mí, cogió el menú y lo acercó mucho a sus ojos para poder leerlo. Pareciera que estuviera acostumbrado a aquel local porque sabía perfectamente donde sentarse y se le notaba cómodo. Cuando le vi mirar muy de cerca el menú, en ese momento, como en otros momentos de mi vida en el que me encuentro con gente que padece enfermedades (psíquicas o físicas), personas pobres, ancianos con reducida movilidad, gente que me cuenta sus dificultades… me invade un fuerte sentimiento de compasión, que no de pena, y es entonces cuando intento enseguida pensar algo positivo hacia ellos y se me ocurrió esto.
La compasión pasó a un segundo plano y lo que siento hacia ellos, es la más absoluta admiración por su increíble fortaleza y por la inmensa lección que nos aportan. Les miro como seres superiores que nos enseñan y que conseguirán un mayor premio debido a sus adversidades. Parto de la premisa no demostrada de que existe un más allá y que supongo, que debe ser mejor que esta realidad, si tenemos en cuenta que allí no hay un cuerpo físico que se enferme, envejezca o de la lata.
Creo que cuando alguien muere, se gradúa. Me gusta llamarlo así, le resta seriedad y le aporta un enfoque positivo. Vivir es difícil, aunque eso también conlleva su lado de magia, pues lo que más cuesta, más se valora. Creo que estamos aquí todos haciendo un master del universo, que venimos a aprender y a practicar el amor y que las personas que vienen con mayores hándicaps y dificultades, aquellas que padecen enfermedades, con condiciones peores o que sufren más que los demás, se gradúan con más puntos y esos puntos en el otro lado se recompensan.
Me gusta imaginar que deben hacerles grandes fiestas de graduación y que la alegría por haber conseguido graduarse con tantos puntos es mayor. Cuanto más dura sea la vida, o cuanto mayor sufrimiento físico, discapacidades, enfermedades o lo que sea que se padezca, más puntos tienen en el otro lado :)
Sé que la idea no puede ser más simplista y disparatada, casi como sacada de la cabeza de un niño de parvulario, pero, ¿y si fuera verdad?
Que tengáis un genial fin de semana y ya de paso, pongámonos a tener una feliz vida. Un abrazo.
 
Beatriz Casaus 2019 ©

sábado, 16 de febrero de 2019

Los otros 364 días de amor (que no son San Valentín)



Que sí, que San Valentín es muy bonito pero no deja de ser un día comercial en el que se consume con la excusa del amor hacia la pareja. Demostremos el amor los otros 364 días del año con acciones y hechos, en bajito y en privado, no solo con palabras bonitas y en redes sociales. 

Es por eso que no suelo mostrar fotos ni dedicatorias en público. Tenemos miles de fotos juntos, pero prefiero mantenerlas en nuestra intimidad, porque no necesito demostrar que nos queremos. El otro día me apeteció subir una foto y lo hice, pero en cualquier momento la puedo cambiar o eliminar, también según me apetezca. En todos estos casi siete años juntos no he subido más que dos fotos (contando con esta última) y es muy probable que no lo vuelva a hacer. 

¿Sabéis lo que es el amor verdadero? querer a alguien cada 
día más y mejor. Evolucionar en el camino gracias al cultivo de una relación sana y construida en un amor de verdad. En nuestro caso, nos amamos como nunca antes nos había pasado. Hemos pasado momentos buenos, otros increíbles, y también distanciamientos no por falta de amor o deslealtad, pero puedo decir que nunca nos hemos dejado de querer. Nadie me ha hecho sentir más querida y amada. Cada uno complementa al otro con sus diferencias y gracias a ello, se crece y aprende.

A todas esas personas que juzgan sin saber nada, que sienten envidia, o que intentan meterse o jugar sucio, lo siento por ellos y por el karma que acumulan y les mando un fuerte abrazo cargado de amor y todos mis deseos de que cambien esa forma de pensar y sentir que les genera tanta infelicidad y amargura.

Si las relaciones que mantiene la gente tuvieran la mitad del amor que el que nos profesamos, el mundo estaría repleto de personas satisfechas y llenas. Dejemos amar. Yo lo hago, y se vive en paz y cargada de amor. Y cuando uno está en paz y amor, (no me refiero solo al de la pareja) desea lo mismo a los demás. 

¡Feliz fin de semana!


Beatriz Casaus 2019 ©






domingo, 27 de enero de 2019

Primera poesía de 2019


"Escoge una persona que te mire como si fueras magia" (Frida Kahlo)

"El amor es una muestra mortal de inmortalidad" (Fernando Pessoa)


Sé que nadie lo entiende

Sé que nadie lo entiende,
pero vivo en un amor
que va más allá de una boca
que opta por palabras,
esas que me hacen sentir extraviada
entre sus limitantes fonemas.
Cómo hacer entender a alguien
que no está en mí lo que hay en mí.
De eso se encarga la poesía,
me consuela el cerebro,
tan práctico y puntilloso.
Los sentimientos no son palabras,
no nacen desde la cabeza
ni atraviesan el filtro de la mente parlanchina
que cree saber lo que dice,
pero no concibe lo que siente.
Nacen, rebeldes, desde una caricia
y revolotean en el pecho, quemándolo,
viven en el alma y el cuerpo
aprende a interpretarlos.
Sé que nadie lo entiende,
pero albergo un amor profundo
como los cimientos de la tierra.
Los mismos que una vez nos vieron crecer
con otra identidad,
bajo otras barreras.
Te quiero desde antes de conocerte
y te querré también cuando te olvide.
Eres el único que no eres simplemente gente.
Tú eres casa.
Sólo sé que sé amarte, como sé respirar.  
Tan automático y necesario.
Sé que nadie entiende que nos queramos tanto
sin firmar un contrato,
pero nuestro contrato no es de esta tierra.
No sigo reglas establecidas por otros
para hacer que todos seamos iguales.
La originalidad es la victoria
y ser genuino, el tesoro que todos buscan.
Sé que nadie lo entiende,
pero el amor no es para entenderlo,
sino para vivirlo.
Estoy tan acostumbrada a tus abrazos
que tengo la impresión que son la piel del amor.
Soy devota de las huellas que dejas.
Como una hormiguita las voy recopilando e
intento dejar marcas para saber el camino
hacia los momentos de dicha.
Ojalá supiera encontrar la solución
a este conflicto de intereses,
porque la única razón que sigo, son tus ojos.
Sé que nadie lo entiende,
pero es mi forma de quererte.
Que cada uno tenga la suya,
y que el amor crezca.

Beatriz Casaus 2019 ©